En este post os voy a hablar sobre los senderos, que tipos de senderos nos podemos encontrar, su señalización, así como, el tipo de dificultad que estos pueden presentar.
Podemos distinguir dos tipos de senderos, los homologados y los no homologados. Los homologados están autorizados y revisados por el FEDME y las Federaciones Autonómicas y los no homologados como os podéis imaginar no. A continuación os detallo ambos tipos de senderos:
Un sendero homologado es una senda tradicional y en el medio natural, identificada por las marcas propias de la FEDME. La principal razón para homologar un sendero es la seguridad los caminantes que lo van a utilizar.
Todos los senderos marcados y homologados por una federación senderista tienen que:
– tener una señalización completa de toda la ruta, incluidos los cruces, que te permitan el auto guiado sin perdida.
– ser un trazado exento de riesgos, exceptuando los derivados de la climatología extrema.
– dar una información “in situ”, en los puntos de inicio y final, de las características físicas más sobresalientes (distancia, desnivel, tipo de vial, recomendaciones, etc.) y a distancia a través de publicaciones, páginas web, etc.
– una acción de control y mantenimiento de las condiciones iniciales del sendero por parte del promotor que permita su uso a lo largo del tiempo.
Existen 3 tipos de senderos homologados:
1.1-Senderos locales (SL)
Son los senderos más cortos de todos y se encargan de autorizarlos las FFAA y las territoriales. Se identifican con las franjas blanca y verde. Su recorrido no es mayor de 10 km (aunque hay alguna excepción) y su dificultad es baja. Podríamos decir que son los más indicados para una excursión en familia.
1.2-Senderos de Pequeño Recorrido (PR)
Este tipo de sendero nunca superará los 50 km, o lo que es lo mismo, no llevará más de una jornada andarlo entero. Se señaliza con las franjas blanca y amarilla y son los más comunes, ya que en una mañana la mayoría se pueden realizar. Como los SL, también les corresponde a las FFAA y Federaciones Territoriales su gestión.
1.3-Senderos de Gran Recorrido (GR)
Gestionados por la FEDME, estos senderos se identifican con los colores blanco y rojo y tienen más de una jornada de recorrido (más de 50 km) así que, si quieres hacer un GR, será mejor que lleves una mochila bien preparada porque necesitarás pasar la noche en algún sitio.
A parte de estos 3 tipos de senderos, también existen las Variantes, Enlaces y Derivaciones.
En los senderos homologados también podemos hablar de los Senderos Europeos (E), que consisten en caminos de GR que deben pasar, como mínimo, por tres países distintos y que son gestionados por él ERA.
Existen 4 tipologías que pueden aparecer en el itinerario de un sendero, como son: continuidad, cambio de dirección, cambio brusco de dirección y dirección equivocada.
Finalmente, hay unos puntos en los que es obligatoria la colocación de estas señales: al inicio y fin del recorrido, en los accesos a municipios o núcleos de población, en los cruces y en los puntos en los que el sendero cambie de tipo de vía por ejemplo de sendero a pista.
Hay muchos tipos de estos senderos y cada uno tiene un tipo diferente de señalización como pistas naturales, rutas naturales, vías verdes o el propio Camino de Santiago. El único requisito que pone la FEDME para la señalización de estos senderos es que no se confunda con la señalización homologada y que, en caso de que una señalización homologada y no homologada estén en el mismo lugar, la homologada se vea bien.
Por ejemplo, el Camino de Santiago tiene distintas señales características como la cruz o la vieira, otros caminos pueden estar simplemente señalados con postes, yo he visto caminos señalados con puntos durante el mismo… hay muchas posibilidades puesto que no son regulados.
Otro tipo de señalización no homologada son los hitos o mojones, que consisten en montículos de piedra normalmente situados en las partes altas de las montañas donde ya no hay un camino claro ni un sitio específico donde poner adecuadamente una señal por varios motivos (principalmente ausencia de árboles o de alguna piedra que sobresalga).
Otro aspecto muy a tener en cuenta a la hora de elegir una ruta es la dificultad que presenta. Para esto, el FEDME y otras muchas organizaciones recomiendan la utilización del Método de Información De Excursiones o MIDE.
El MIDE recoge una serie de datos sobre el recorrido y mede una serie de factores que nos dará una información de valoración, que se traduce en una tabla que nos da una idea general de la dificultad que conllevara el recorrido.
La información de referencia que aporta son:
La información de valoración consiste en una valoración entre 1 y 5 puntos de cuatro aspectos y está hecha por gente experta y con experiencia y siguiendo un interesante método.
En primer lugar tenemos la severidad del medio, para medir este aspecto se dispone de 18 factores a tener en cuenta, cuantos más factores de riesgo haya durante el trayecto, más alta será la severidad del medio. Algunos factores a medir son: existencia de pasos en los que se deban usar las manos, paso por glaciares o ciénagas o exposición durante el itinerario a desprendimientos.
La orientación en el itinerario nos indica si el camino a seguir siempre está claro y bien indicado o si hay más probabilidades de perderse. Los grados que puede haber son:
1. Caminos y cruces bien definidos
2. Sendas o señalización que indica continuidad
3. Exige la identificación precisa de accidentes geográficos y puntos cardinales
4. Exige técnicas de orientación y navegación fuera de traza
5. La navegación es interrumpida por obstáculos que hay que bordear
La dificultad en el desplazamiento nos indica lo que nos costará transitar por la senda. Es decir, si el firme por donde tenemos que ir es totalmente liso y sin dificultades, si tendremos que ir por sendas con terrenos irregulares y escalones, si tenemos que usar las manos o, la más dificultosa de todas, si hay algún tramo de escalada.
Finalmente se nos indica la cantidad de esfuerzo que necesitamos para recorrer la ruta, medido en tiempo según unos criterios establecidos por el MIDE. Siendo el grado uno de menos de una hora y el grado quinto, el que entraña mayor dificultad, de 10 horas o más de marcha efectiva.
Hasta aquí esta pequeña guía sobre los tipos de senderos que nos podemos encontrar, la señalización de estos y la dificultad de las rutas. Espero que os sirva de ayuda para que sepáis a que os podéis enfrentar cada vez que consultéis que ruta hacer y ver alguna de las indicaciones aquí explicadas.
Nota: Uno puede ir por ahí haciendo marcas e ir señalizando los senderos que le plazca, aunque cumplan con los requisitos. Todo esto tiene un proceso y lo realizar organismos especiales. Respeta la señalización!
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