Al este de la Llanada Alavesa, se encuentra la sierra de Altzania. Esta sierra calcárea hace de límite entre las provincias de Álava y Guipúzcoa. Y es precisamente en esta sierra donde se encuentra el monte Olano, también denominado Aitzandi de 1083 m.
La ruta comienza en el aparcamiento de La cueva de Leze, al que se accede por la carretera que une las localidades de Egino e Ilarduia (Alava). Desde el propia aparcamiento se puede ver la enorme entrada a la cueva, la cual es inaccesible a pie ya que de ella emana un río (sólo es posible adentrarse con equipo de descenso de cañones y espeleología). Nosotros decidimos dejar la visita a la entrada de la cueva para después de la ruta.
Desde el aparcamiento sale un camino a la izquierda que nos lleva hasta el farallón calizo, donde en su base, la pista se convierte en sendero. Este sendero nos lleva hasta el filo de un bloque separado de la montaña.
Empezamos a subir por la arista que está equipada con pasamanos para evitar caídas, aunque el camino es ancho y no existe demasiado riesgo aparente, aun y todo hay que pasar con precaución.
Una vez superado este tramo, llegaremos a una tubería de hormigón bastante antigua por cuyas inmediaciones transcurre el sendero que en fuerte pendiente gana altura hasta una canal herbosa, la canal de Larrondo.
Subimos por el canal hasta llegar a una bifurcación, donde dejamos el sendero que continua por la canal, para tomar otro sendero que se introduce en un bosque de encinas por la derecha.
Desde aquí seguiremos ganando altura hasta llegar al collado superior con bastante roca caliza. Desde aquí las vistas son espectaculares. Decidimos parar a comer y beber algo.
La cima de Olano, la tenemos a nuestra derecha. Con cuidado, porque había lado de nieve, empecemos a subir por la cresta hasta llegar a la cima de Olano. Las vistas desde la cima son espectaculares donde al norte podemos ver Allaitz, Imeleku, Aratz y el macizo de Aizkorri. Hacia el noreste, Arbarain y la sierra de Aralar. Hacia el este, la sierra de Urbasa, sierra de Andia e incluso los Pirineos. Al sur, destaca la sierra de Entzia y sierra de Iturrieta. Por último, hacia el oeste, Montes de Vitoria y la Llanada Alavesa.
El regreso lo hicimos desandando el camino de subida.
Una vez abajo, nos acercamos a la entrada de la cueva de Leze. Como ya os he comentado antes, por la cueva pasa un río, que proviene de los barrancos que desaguan en La Hoya de La Leze, al otro lado de la montaña, por lo que para entrar dentro de ella solo se puede con el equipo de espeleología. Impresiona el tamaño de la entrada. Al lado de la cueva hay unas mesas donde decidimos comer antes de volver al coche.
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