Senderismo con Perros II

Hacer senderismo o montañismo es una maravilla, sin embargo, a muchos dueños de mascotas les duele dejar a sus compañeros en casa esperando. Las dudas acerca de si llevar o no a tu mascota canina al monte o incluso sobre si estará preparada o no para hacer senderismo, son cada vez más frecuentes.

Para aquellas personas que tienen mascota canina, hacer senderismo con perros puede significar una gran oportunidad para sentir el placer de disfrutar de la actividad al aire libre junto con ellos.

¿Por qué no hacer senderismo con tu perro?

Andar por  la montaña con tu perro puede ser una experiencia muy agradable y saludable para ambos. Pero para que así sea, debemos tomar una serie de precauciones necesarias que nos permitan llevar a cabo esta actividad de la forma más segura posible, sobre todo para nuestro compañero canino. Una organización adecuada del plan nos permitirá prever consideraciones a tener en cuenta que pueden afectar tanto a nuestro perro como a nosotros mismos y trastocar nuestra ruta.

En un post anterior os hablaba de varios aspectos a tener en cuenta antes, durante y después de la ruta de senderismo con nuestro perro. Podéis leer AQUÍ el post.

1.Requisitos previos para hacer senderismo con perros

Antes de planificar nuestra ruta de senderismo con nuestro perro, debemos asegurarnos que podemos hacer senderismo con nuestro perro. Para ello, debes de:  

1.1 Hablar con tu veterinario

El veterinario podrá decirte si tu perro está preparado o no para hacer senderismo o trekking. Por ejemplo, no se puede hacer senderismo con cachorros. Los cachorros son tremendamente susceptibles a patógenos y elementos tóxicos que pueda haber en el entorno, pues su sistema inmune no está del todo maduro. Además, tanto los cachorros como los perros jóvenes tienen un esqueleto que todavía no está totalmente desarrollado. Por lo que, no es recomendable exponerlos a actividades deportivas. Normalmente hasta el año de edad, la estructura ósea de un perro no está totalmente formada, aunque eso va a depender del tamaño, la raza y otros factores.  

Además, nuestro perro debe tener su cartilla de vacunas en regla. Cuando estamos en la montaña con nuestro perro, es fácil que este beba de lagos o estanques sin que nos percatemos. Estas aguas pueden estar contaminadas por las heces de otros animales. Lo que supone un riesgo de contraer determinadas bacterias como la leptospirosis. Por ello, si vamos hacer senderismo de forma habitual con nuestro perro o vamos hacer rutas de varios días por el monte, debemos hablar con el veterinario por si fuese necesario administrarle alguna vacuna. 

1.2 Obediencia

Cuando hacer senderismo con perros es fundamental que nuestro perro sea capaz de obedecernos en cualquier ámbito. Duran la ruta puede aparecer caballos, cabras, bicicletas, otros perros, personas y niños y todo esto genera estímulos en nuestro perro que debemos contralar de una manera tranquila y calmada. Nuestra capacidad de contralar a nuestra mascota es fundamental cuando hacemos senderismo, tanto en presencia de otros animales como en la seguridad de nuestro propio perro.

No todas las rutas de senderismo o entornos naturales, permiten la entrada de perros. Asegúrate de que el recorrido escogido permite su acceso.

1.3 Estado físico de nuestro perro

Lo mismo que nos pasa a nosotros, les pasa a los perros. Debemos de prepararlos para hacer senderismo. La mayoría de los perros están preparados para hacer pequeños paseos por la ciudad. Pero, cuando se trata de rutas más largas por terreno irregular, es otra cosa.

Una buena idea es realizar un entrenamiento previo en el que progresivamente vayamos aumentando la duración. Si vemos que al terminar la caminata nuestro perro está todavía activo, podemos incrementar la duración al siguiente día. Es recomendable que los senderos sean parecidos a los que realizaremos, para que las patas se vayan acostumbrando a caminar por terrenos irregulares y se endurezcan las almohadillas.

2.Cómo planificar rutas de senderismo con perros

Antes de realizar cualquier ruta de senderismo, es fundamental hacer una buena planificación de la misma. Algunos de los aspectos en los que tienes que pensar son entre otros,  la legislación a cumplir que afecta a la ruta, la meteorología para la fecha que vayamos a elegir, el vestuario, la comida o los medicamentos y utensilios básicos para que podamos curar a nuestro animal si necesita atención médica.

2.1. Comprueba la legislación del enclave natural

Suponemos que es probable que si deseas practicar senderismo con tu perro, tendrás ya un lugar en mente para elegir dónde realizar la ruta. Si es así, una vez decidido el lugar, deberás comprobar antes de nada la legislación del enclave natural donde vayas a ir con tu perro, ya que puede darse el caso de que vayamos a caminar con nuestro perro a una zona protegida en la que no se permite practicar senderismo con mascotas. También puede suceder que la normativa indique que el animal debe llevar correa para no alejarse de los terrenos en los que es obligatoria esta normativa. Trata de dejar cerradas las vallas o verjas que tengamos que sobrepasar en nuestro recorrido y evita los pasos restringidos o prohibidos.

2.2. La comida y bebida

Llevar contigo bebidas y algo de comida resulta esencial sea cual sea el recorrido que vayamos a completar, ya que, al igual que tú, necesitará hidratarse durante el paseo y no le vendrá nada mal ingerir algún alimento para continuar la marcha. Ten presente que puede darse la situación de que no tengamos a nuestra disposición durante el recorrido fuentes de agua en las que nuestro cánido pueda refrescarse sin problemas.

El agua que nuestro perro debe beber al día está en función de los kilos que pesa. Normalmente se calculan unos 70 ml por kilo. Así, si nuestra mascota pesa 20 kg, debería beber cerca de litro y medio. Pero si hace ejercicio, esta cantidad debe incrementarse, y más todavía si la ruta es en un día cálido. Un truco es observar la nariz de nuestro perro. Si está seca, entonces nuestro perro no está lo suficientemente hidratado. Es importante que el agua se le ofrezca de forma distribuida durante la ruta.

La cantidad de comida para hacer senderismo puede ser calculada en base a las tablas que se encuentran en el paquete de pienso. Normalmente estas tablas traen varias filas en función del peso de nuestra mascota y también varias columnas en función de su actividad. Escogiendo el peso de nuestro perro y la columna de actividad elevada, daremos con la cantidad que necesitamos por día.

Además de estas pautas generales y de los consejos de su veterinario, debemos tener en cuenta nuestras propias necesidades. Si nosotros necesitamos parar para beber o comer, quizás nuestro perro también lo necesite.

2.3 La meteorología

Comprobar la meteorología es otro de los puntos importantes a tener en cuenta antes de realizar la ruta de senderismo, ya que no es conveniente ejecutar el plan ni un día en el que podamos sufrir un golpe de calor ni cualquier otro en el que la lluvia y el mal tiempo sean los protagonistas.

2.4. Botiquín de primeros auxilios

Es imprescindible contar en nuestra ruta con un botiquín con utensilios de auxilio en el caso de que tanto nosotros como nuestro perro podamos sufrir algún accidente inesperado que debamos atender en pleno recorrido. Recuerda que en cualquier zona de montaña o campo los mosquitos y parásitos pueden hacer su aparición en cualquier momento, por lo que el perro debe estar protegido ante posibles picaduras o roces.

Lo ideal es que contenga vendas, algún tipo de desinfectante, también algún analgésico, unas pinzas similares a las de depilar y un cortaúñas.

Ante cualquier duda, siempre es bueno consultarlo y asesorarse con el veterinario.

2.5. Ten en cuenta las limitaciones físicas de tu perro

Tanto el tipo de terreno como las limitaciones físicas de tu perro deben ser razones determinantes a la hora de elegir la ruta de senderismo. Debemos prestar atención en la planificación del recorrido, para que nuestro animal no sufra.

Debemos tener en cuenta que nuestro perro puede sufrir durante la ruta al no poder seguir el ritmo de nuestros pasos o si escogemos un camino con un terreno complicado que pueda provocar en el animal heridas, sobre todo en sus almohadillas. Es conveniente por tanto que cada cierto tiempo, durante el recorrido, revisemos sus patas y almohadillas por si existe algún daño, lesión, rozadura o corte al que debamos atender.

2.6. La documentación del perro no debe quedarse en casa

Los datos básicos de nuestra mascota y la cartilla de vacunación son elementos que no debemos dejarnos en casa a la hora organizar una ruta de senderismo con perros, sobre todo si vamos a hacer una ruta de varios días. Puede que en cualquier momento podemos tener la necesidad de identificarnos o mostrar la correspondiente cartilla con los papeles en regla de nuestra mascota a cualquier persona que nos la puede solicitar en el trayecto.

Al igual que con la documentación, es primordial que contemos con el número de nuestro veterinario más cercano o con el que habitualmente contemos, por si en cualquier momento, pese a nuestros mecanismos de prevención, nuestro perro necesita atención médica y podamos contar con los servicios de un experto.

2.7 Otros útiles recomendables para hacer senderismo con perros

-Bebedero: Actualmente hay muchos tipos de bebedero. Los más recomendables son aquellos que son ligeros y plegables. Algunas personas que hacen senderismo con perros han enseñado a sus mascotas a beber por una botella. Esta puede ser una opción si tienes tiempo para enseñar a tu mascota esta nueva habilidad.

-Bolsas resistentes para recoger los excrementos: Todos los propietarios civilizados de perros llevamos bolsas para recoger los excrementos de nuestra mascota cuando vamos por la calle. Sin embargo, podríamos pensar que en la montaña no es preciso, pero este es un falso mito. En primer lugar, si las cacas de nuestro perro están en el camino pueden molestar a otros senderistas. Pero además, y más importante, los excrementos de perro pueden dañar el entorno natural, al contener bacterias y parásitos que no están en los entornos naturales, y que pueden pasar a acuíferos o a los estómagos de otras especies. Podemos optar por llevar bolsas resistentes que aguanten el trayecto o bien usar una pequeña pala para hacer un agujero con una profundidad de unos 12 centímetros a unos 70 pasos del camino principal y enterrarlas. La idea clave es dejar la nuestro camino igual que estaba antes de nuestra llegada.

-Toalla para perros: Esto es interesante si estamos haciendo un trekking de varios días y vamos a dormir en una tienda de campaña, es importante que esté completamente seco antes de ir a dormir.

-Botines o patucos: En una ruta de senderismo es importante que nuestro perro tenga las almohadillas endurecidas para que impidan que se haga daño. Las almohadillas se endurecen cuando el perro camina con frecuencia por terrenos de este tipo. Si creemos que las almohadillas de nuestro perro no son lo suficientemente duras, puede resultar útil comprar unos patucos o botines de senderismo. 

3. Cómo prevenir peligros al hacer senderismo con mi perro

3.1 Cansancio y golpe de calor

Es normal que nuestro perro jadee y tenga el pulso acelerado después de una caminata. Pero si vemos que tarda en normalizarse tras un descanso, es mejor no retomar la ruta.

Si estos síntomas se dan con tiempo cálido debemos ser precavidos, pues puede tratarse de un golpe de calor.

Cojear o mostrar alguna molestia en las patas también es un aviso de que debemos acortar o detener la ruta.

3.2 Otros animales

Ya hemos nombrado lo peligroso que puede ser que nuestro perro se acerque a un caballo o a una vaca. Pero además existen otros animales que pueden acecharlo. El campo y la montaña son entornos proclives para que nuestro perro acoja viajeros indeseables como las garrapatas. Es recomendable revisar en profundidad su pelaje para asegurarnos de que no porta ningún indeseable parásito.

3.3 Plantas

Aunque no lo creas, los perros tienden a masticar plantas y aunque muchas de ellas pueden ser inofensivas, y otras pueden causarle estragos, sobre todo aquellas que tienen pinchos que se clavan con enorme facilidad. Es importante detenerlo en cuanto notemos que está comiendo cualquier planta.

3.4 Agua contaminada

La recomendación es clara, nuestra mascota no debe beber el agua de ríos o lagos. No sabemos si esta agua está contaminada. Así que no debemos dejar que lo haga. 

3.5. Seguro para perros en la montaña

Cuando haces senderismo con perros, tienes que recordar llevar al perro atado con un collar de arnés para proporcionarle la suficiente seguridad y comodidad, y evite sobre todo que se extravíe o moleste a otras personas y animales.

Para quedarnos totalmente tranquilos, siempre podemos optar por contratar un seguro para perros que nos cubra ante cualquier imprevisto que pueda suceder durante la ruta.

4. Mochila para perros

Es algo muy curioso que solo lo había visto en documentales, pero que cuando vas hacer una ruta de varios días, puedes ser muy interesante, y son las mochilas de montaña para perros o a veces también llamadas alforjas para perros.

Es una manera que nuestro perro porte una pequeña parte de la carga.

4.1 ¿Cómo acostumbro a mi perro a llevar una mochila de senderismo?

Es importante que nuestro perro se acostumbre a llevar mochila antes de salir. Primero podemos ponerle la mochila vacía por casa. Es normal que al principio no le guste, pero si la mochila es adecuada, en breve debiera habituarse. Una vez que ya no le moleste, podemos probar a sacarlo de paseo con ella todos los días, de tal manera que relacione salir de caso con la mochila.

Posteriormente podemos introducir algo de peso (de forma equilibrada en ambas alforjas). Para finalizar, iremos incrementando paulatinamente el peso hasta llegar a una carga similar a la que deberá portar en la ruta de senderismo, que no debe superar el 25% del peso del perro.

Pero existen otros factores como la edad, el tamaño y la fuerza del perro que pueden hacer que la carga de su mochila varíe.

Ante cualquier duda siempre es mejor consultar con el veterinario.

4.2 Escoge bien la talla

Una buena mochila para perros es aquella que se ajusta completamente a él, pero no le oprime. De hecho hay mochilas para perros que tienen un amplio abanico de tallas.

Las tallas se fijan en función del tamaño del pecho. Debemos tomar como medida la circunferencia del tórax de nuestro perro. Para ello debemos valernos de una cinta métrica y colocarla alrededor de la parte más ancha de la caja torácica.

Al colocar la mochila debemos buscar que le quede bien ajustada, pero sin oprimirlo o dificultar sus movimientos. También debemos evitar dejarla con demasiada holgura, lo que podría provocarle rozaduras o que se resbale.

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