Pero antes de empezar me gustaría aclarar una cosa. Con este post, no pretendo crearte una necesidad de compra que quizá no tengas. Quizá no salgas cuando dan malo o sueles hacer excursiones muy cortas, en las que rara vez tardas más de 1 hora en llegar al coche o ponerte a cobijo. Si eres de este tipo de personas, entonces puede que no necesites un pantalón impermeable, sin embargo descubrirás, si decides comprar uno, que lo usarás más a menudo de lo que crees, te resultará más agradable caminar cuando hace mal tiempo y estarás más protegido cuando las cosas se ponen feas en media y alta montaña.
A la hora de la compra puede que nos vayamos a los extremos: comprar uno de bajísimo coste por 20€ o adquirir uno de los más técnicos, que pueden alcanzar los 300€.
Personalmente creo que todo va a depender de tu actividad. Evidentemente, no pediremos las mismas cualidades a los pantalones impermeables que llevaremos puestos durante todo el día en jornadas invernales y de alta montaña que a los que llevaremos en la mochila para salvarnos del aguacero ocasional. Por lo tanto, analiza tu actividad.
Pues bien, la impermeabilidad sería la primera de las cualidades que debemos fijarnos. En el material de montaña la impermeabilidad se mide por cuántos milímetros de columna de agua soporta el tejido sin calarse. Una prenda que soporta 10.000 mm de columna de agua se puede considerar suficientemente impermeable para soportar bastante más que un chaparrón. Si cogemos esta referencia, de esa cifra hacía arriba cabe esperar una mejor protección frente al agua y, hacía abajo, su impermeabilidad será menor.
Pero ¡ojo! cuando andamos por la montaña estamos realizando una actividad física, que genera calor. Si ese calor no sale, se genera condensación dentro del pantalón y por lo tanto humedad. Es muy importante buscar un equilibrio entre la temperatura corporal en actividad, la temperatura exterior y el aislamiento de la ropa que llevamos.
Por ello, debemos comprar pantalones hechos con materiales que resistan el paso del agua y a la vez permitan la salida del sudor. Es decir, no solo debe ser impermeable, sino transpirable también.
Pero no debemos olvidarnos que en buena medida el funcionamiento de los pantalones impermeables dependerá también de qué tipo de prendas llevemos por debajo. Si las interiores no facilitan la salida del calor, entonces, poco podrá hacer esta capa externa, que es el pantalón impermeable.
A la hora de comprar un pantalón impermeable, debemos fijarnos que este nos permita hacer movimientos amplios de piernas, que cuente con bolsillos propios o permita el acceso a los del pantalón interior, para poder llegar a ellos sin dificultades. Evidentemente, los bolsillos y cremalleras deberán contar con tiradores, para poder manejarlos con guantes, y estar termosellados para evitar la entrada de agua.
Si necesitamos unos pantalones impermeables para entornos más duros, como la montaña invernal, procuraremos que sus cremalleras y sistemas de sujeción nos permitan ponérnoslos con facilidad.
Otros detalles en que debemos fijaremos a la hora de escoger nuestros pantalones impermeables serán los sistemas de ajuste que tenga en cintura y tobillos, así como si cuenta o no con polaina interior, especialmente en los pantalones más técnicos. Es importante poder sujetar bien la polaina a la bota, para evitar que la nieve entre dentro y se cuele en el calzado.
Y por último y no menos importante, sobre todo si lo que buscamos son pantalones impermeable más técnicos, son las zonas reforzadas. Las zonas de mayor roce, como rodillas, posaderas y zona de contacto de los tobillos entre sí, sufren desgastes mayores y riesgo de enganchones, por ejemplo, con los crampones, por lo que deben contar con tejidos que eviten desgarros y una rápida pérdida de la impermeabilidad.
Como ya he dicho antes, a la hora de escoger un tipo de pantalón impermeable u otro dependerá de la actividad que vayas a hacer.
Tenemos el típico y ligero «pantalón chubasquero» que puedes usar todo el año. Este no ocupa ni pesa mucho y te lo puedes poner encima de unas mallas térmicas o pantalón que lleves en ese momento. Este tipo de pantalón te protegerá tanto del frío como del viento y el agua. Un buen ejemplo calidad-precio puede ser el modelo Pouring Adventure, de Columbia.
Ahora bien, si vas a realizar actividades alpinas, donde las condiciones son más extremas, necesitarás un pantalón técnico con Goretex Pro. Estos pantalones son transpirables, duraderos y cortavientos. Algunos incluso vienen con las polainas integradas. Un ejemplo de este tipo de pantalones es el TRX2 SHELL PRO de Trangoworld.
Espero, con este post, haberte aclaro un poco la utilidad de los pantalones impermeables, cuando usarlos y como elegirlo.
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PIES MOJADOS EN LA MONTAÑA, COMO EVITARLOS
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